Organizado por la Consejería de Educación y Cultura y financiado por el Ministerio de Educación, reunirá en Mérida a casi 400 profesionales del ámbito educativo entre los días 5 al 7 de octubre.
Se trata de una importante cita en el ámbito educativo, que servirá para que especialistas de todas las comunidades autónomas debatan y expongan sus ideas y experiencias sobre este campo tan destacado como es la Inteligencia Emocional.
En el congreso participan 22 ponentes de reconocido prestigio, y contará con 8 talleres prácticos y una mesa redonda, un encuentro que aspira a ser un foro abierto y participativo dedicado a la reflexión, al intercambio de experiencias e ideas sobre la aplicación de la inteligencia emocional en la educación.
Para César Díez Solís, este congreso persigue impulsar el conocimiento en la comunidad educativa de los fundamentos de los programas de inteligencia emocional, además de presentar y promover el intercambio de prácticas educativas de éxito vinculadas con actuaciones sobre inteligencia emocional. Otro de los objetivos es proporcionar a los asistentes los recursos prácticos necesarios para la puesta en marcha de dinámicas y técnicas sobre inteligencia emocional en el aula.
Extremadura está apostando por la incorporación de la inteligencia emocional en el ámbito educativo. Una prueba de ello es la creación de la Red Extremeña de Escuelas de Inteligencia Emocional, formada por 29 centros educativos. En estos centros se trabajan las cinco habilidades prácticas de la inteligencia emocional de una forma transversal al currículo: la autoestima, el control del estrés, la motivación, la empatía y las habilidades sociales.
El secretario general de Educación destacó que Extremadura es una de las primeras regiones en impulsar las competencias emocionales según la nueva Ley de Educación de Extremadura, algo de gran interés en el ámbito educativo, pues estas nuevas ideas y tendencias son una respuesta a la realidad y una vía para el desarrollo socio-emocional en las aulas.
Según explicó Díez Solís, las técnicas de inteligencia emocional tienen como objetivo “incrementar la empatía, la autoconfianza y la buena conducta” de los alumnos, a los que se les enseña a “pensar, actuar y sentir”, y anunció que el Gobierno de Extremadura adquiere un compromiso firme con los objetivos de este congreso, de forma que la Comunidad Autónoma “sea referente nacional e internacional de estos programas”.
La enseñanza tradicional, orientada exclusivamente al conocimiento, ha resuelto con cierto éxito la necesidad humana de desarrollo intelectual, pero no ha encontrado muchas soluciones a los problemas personales que el desarrollo intelectual conlleva. Ésta es la carencia en la que se centra la Inteligencia Emocional, que a la vez puede aportar otros principios -desde el mundo de las emociones y los sentimientos -para mejorar el aprendizaje.
La experiencia muestra que para facilitar el aprendizaje y la creatividad, es fundamental el desarrollo tanto de la vida intelectual como de la emocional.
Fuente: Junta al Dia